Avenida Corrientes, principios de los noventa… tomo un café con alguien mirando a lo largo de la madrugada los negocios empapelados de diario, se alquila, nos vamos… Oscura, casi sin luminarias, muriendo como su prima hermana Lavalle que se nos va llenando de “iglesias” sobre las ruinas de los cines. A nuestro lado avanza con esfuerzo un flaco de mechas largas y canosas, campera de jean, cara de cansancio, bigotes y barba descuidadas. Tiene mirada de joven, nuestra, de compañero (política o rock quién sabe). Se toma de una mesa y cae en cámara lenta sin soportar su espalda ancha de rugbier o motoquero y la enorme delgadez. Me apuro a ayudar para que se levante. “Tené cuidado, flaco, tengo sida”, me mira vencido. Lo agarro mejor y se levanta. Nos saludamos con un gesto y cada uno se va por su lado. Esto es el menemismo.
Las patillas y el poncho. La jura riojana del ‘73 con banderas de la juventud maravillosa. Menem. Quiroga. Menem. Poco más…, algunas actitudes: el ramo de rosas que Isabel no le recibió; el acompañamiento al acuerdo con Chile. La Renovación desde el interior profundo. Calidez, carnaval de harina, fiesta. No mucho más.
“Mejor cualquier revolución que ninguna”, contratapa de Página de nosequién. Después gritar y correr atrás del micro gigante, saludarlo y mirar la gente. Los papelitos y la banda del Tula al frente. La marcha (y yo que estrenaba peronismo).
A los tres meses Bunge y Born. Después Adelina, María Julia, el Capitán Ingeniero Alsogaray. El presidente recibe al almirante Rojas en la Casa Rosada. “Yo no puedo ver enjaulados ni a los canarios”. Indulto. Indultos.
¿Qué palabra “neoliberalismo”? Revolución Conservadora, si parece una joda. Pero no es. Revolución Productiva (¿salariazo?). Modernización. Continuar a Perón, ahora a privatizar todo aquello que el General se vio obligado a estatizar. Lo presentaban así, ¿o no se acuerdan? Comenzó a ser rubio para los rubios, más alto para las vedetes, hermoso para los que lo veían como a un monito. Se vistió de putamadre. Carísimo.
Miles de miles de ex trabajadores. Tramos y tramos de rieles oxidándose. El Congreso si que fue una escribanía. Voces solitarias en contra: el Movimiento de los Trabajadores Argentinos de Moyano; el entonces Congreso de los Trabajadores Argentinos (después Central, la CTA), la senadora Cristina Fernández de Kirchner que termino echada del bloque por el Hermano Eduardo.
Algarabía. Fiesta. Cuotas. Viajes. UnoaUno. Nosotros nos quedamos en el cuarenta y cinco. Los pelotudos del 17 de octubre y el peronismoserárevolucionarioonoseránada… ¡cuánta soledad, hermano!
Está viejo. Cuando sonríe parece que se le va a caer parte de la cara. Parece inofensivo. Casi cómico. Todos hacen bromas sobre su habilidad para hacerse notar y ser imprescindible en el Senado (el voto que va y que viene).
Menem sale caro. Nos salió muy caro. Una generación o dos caro. A la basura. Una construcción social estatal de caro. A la basura. Un nivel educativo de caro. Orgullo y dignidad como costo, a los perros. Y la gente se reía, y mucha gente se reía.
Pasa que el Enemigo es el enemigo, nada bueno se espera del Enemigo. Siempre el que traiciona es un compañero, del que no se espera algo así. Un compañero con el que suponemos compartir ideas, proyectos y pasado. Un traidor que se caga en el pasado y hace mierda el Estado Justicialista, porque los gorilas no pudieron, porque necesitaban a uno de adentro.
Menem.
Una posdata personal: Hijo de Puta.
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Permitame decirle compañero, que sus entregas de "Los Miserables", las dos, son magníficas, inmejorables, buenísimas. De más está decirle que espero con ansiedad futuros miserables. Bobos?¿, Pinocho?¿. Fumando espero.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo peronista
Hasta la victoria siempre
Muy bien escrito, un posteo genial, muy bueno. Igual pienso que algunas cosas para hacer mierda quedaron, el jaque lo dió de la rruina para mi...pero esa es otra historia, saludos P:
ResponderEliminarPalabras tan exactas para una
ResponderEliminardécada miserable.
Lo voté y a los pocos días me dije:
nunca más el peronismo va a contar con mi voto, que se vayan a.....-actitud similar cuando un hincha rompe el carné del club-
-siempre fuí peronista y más en los 60' y 70' cuando no era fácil serlo-, me sentía mal totalmente defraudado,
bueh, aquí me ve, rompiendo mi promesa y volviendo a las fuentes desde el 2003.
le dejo un abrazo en Paz
Adal
Me identifiqué mucho con tus vivencias, Marquesito, y con tu interpretación de esa década. Es oportuno y necesario exhumar el recuerdo de esa época miserable, porque, los muertos vivos siempre amenazan con volver. Nos acechan, queriendo destruir la esperanza y los logros obtenidos muy a su pesar. Agrego al recuerdo, la tristeza de las barriadas fabriles sin trabajo, el sentimiento de desesperación e indignidad en el rostro de miles y miles de jóvenes y adultos sin trabajo, y sin posibilidad alguna de obtenerlo, y todo en nombre de la modernidad y la inserción de Argentina en el mundo!
ResponderEliminarEsa tragedia social nos obliga a estar atentos,y esclarecidos.
A la espera de la próxima entrega!
SAM